LA TRISTEZA NO VA CON NOSOTROS

P Para muchos de los que halláis visto éstas dos imágenes no tendréis la mínima duda. Son dos fotos de la misma persona con treinta y seis años de diferencia.Exactamente los veinticuatro y los sesenta, años en los que falleció.  Sí, es Syd Barret. La reflexión que van a leer a continuación viene dada por los cuarenta y cinco años del primer álbum de Pink Floyd, " The piper at the gates of dawm"durante éste mes de agosto. Título terrorífico como presagio para una vida para nada triste o desangelada de unos estudiantes de arquitectura que publicaron singles como " See Emily play" de ritmos nada oscuros, si no más bien un homenaje a los Beatles. Expulsión del grupo por desbarres mentales, ellos dicen que por excesivas drogas,colaboraciones en trabajos del propio grupo y posteriormente en solitario, curiosamente producidos por David Gilmour y Waters.  "Wish you were here" en su recuerdo, o "Confortably numb" como su pérdida total. Pequeñitas obras maestras ( ver en you tube) como "Bob dylan blues" mantuvieron su mente abierta hasta su locura total y muerte, en 2006 en un psiquiátrico sin saber ni siquiera su nombre,. 
Bien, después de la historia viene el alma.Me explico. Pink Floyd y Syd Barret simplemente me evocan recuerdos. No, no es pedantería. Su música triste, lenta en su mayoría me traen a la mente momentos felices y para nada instantes o tiempos horribles que todos hemos tenido.. Lentamente me dejo sumergir  en sus intenciones y siempre llego a una conclusión: Somos recuerdo. El ser humano vive mientras sea recordado por alguien. Una sola imagen de esa persona evita su desaparición, su olvido. Y en éste caso escuchar "Wish you were here" no provoca tristeza siendo una canción triste. Invita a los recuerdos con los amigos o con personas desaparecidas, pero, en mi caso; siempre en momentos felices. Oir cantar a Syd barret en sus discos, grabados en casa de sus padres puesto que ya estaba demente, me produce una tremenda felicidad a pesar del tono desancompasado y voz quebrosa. Quizás no sé bien lo que decir , pero si sé bien lo que digo. Siempre recordamos a alguien perdido y el alma a perdida de Syd, al igual que otros poetas españoles en centros mentales,me ayudan a recordarles, pero lo tristeza no va con nosotros.